Esta semana ya había anunciado que iba a tener un público muy especial! Pero ha sido más que especial, ha sido un público fabuloso, excepcional, encantador!!! Os cuento…

Ayer estuvimos en la residencia de Ancianos la Sabina en Albelda, la verdad que tenía un hormigueo en el estómago porque nunca había tenido un público de esta altura, así que llegue pronto como acostumbro. Llegue una hora antes y para mi sorpresa ya tenía más de la mitad de mi público esperándome! allí estaban sentados, observaron mientras montaba, todos mis vasitos, mis pociones, la verdad, ese ratito de montaje siempre con unos pocos de nervios desaparecieron por arte de magia porque estuvimos charlando, contándome lo bien que les cuidan y lo bien que están! Participan en un montón de actividades durante la semana, baile, guitarra, y los viernes o fines de semana un mago, chistes, y más…

Los residentes y sus familiares participaron activamente en la charla ofreciéndose voluntarios para ayudarnos. Se sucedieron varios experimentos de cambios de colores, burbujas que levitan, telequinesia y pudimos comer hasta un huevo frito verde que nos cocinó la residente Rosalía.

Muchas gracias a la Residencia la Sabina por invitarnos a pasar una tarde de viernes con ellos, gracias a los abuelitos por sus aplausos y cariño. Y gracias a Bea la trabajadora social de la Residencia  y amiga por pensar que Viaje al Centro de la Ciencia podría ser una actividad para llevar a la residencia

Seguro que en un tiempo volvemos de visita y a llevarles algún experimento nuevo!

Aquí os dejamos algunas fotos del evento.